Salen a subasta importantes fotografías de Cartier-Bresson y Centelles
Cerca de 170 imágenes de los destacados fotoperiodistas se rematarán en Barcelona el 27 de mayo.
11/05/2010 - 16:28
Casi 170 fotos de dos maestros de la fotografía documental del siglo XX, Henri Cartier-Bresson y Agustí Centelles, serán subastas el próximo 27 de mayo en Barcelona tras ser expuestas el 13 y 14 de mayo en Madrid, dijo hoy Juan Naranjo, director de Fotografía de la Casa de Subastas Soler y Llach.
La casa internacional de subastas Soler y Llach ha preparado lotes que reúnen 263 obras, entre las cuales hay unas 170 fotos con un precio promedio de salida de entre mil y tres mil euros y algunas de las cuales son "icónicas" -matizó Naranjo- en las carreras del francés Cartier-Bresson y del valenciano Centelles.
De Cartier-Bresson, quien fundó junto con Robert Capa y David Seymour la mítica agencia Magnum, la casa barcelonesa saca a la venta 172 documentos que atesoró Josep Martínez, "una de las colecciones más importantes en España" de ese fotógrafo, indicó el responsable.
Dichos lotes constan de "unas 70 u 80 fotos", "80 fotolibros" -varios están rubricados y dedicados al coleccionista catalán-, "cuatro retratos de Cartier-Bresson realizados por (las fotógrafas de Magnum) Martine Frank e Inge Morath, y correspondencia", detalló el responsable del departamento de Fotografía de Soler y Llach.
Esas imágenes del creador del concepto "El momento decisivo", que se encuentran en buen estado de conservación y fueron positivadas en su mayoría en los años 60 ó 70 -aunque alguna data de los 50-, salen con un precio de entre 1.000 y 3.000 euros, afirmó Naranjo.
Además de las fotos de ese maestro de la cámara Leica (1908-2004), a quien el museo neoyorquino MoMA le dedica una gran retrospectiva hasta el próximo 28 de junio, la casa Soler y Llach pone ese mismo día a la venta 91 fotos de Agustí Centelles (1909-1985) con un precio estimado de entre 700 y 2.000 euros.
Las instantáneas, que están datadas entre 1934 y 1939 -sólo alguna es de principios de los años 30- forman "un conjunto que ha sido muy difícil de conseguir", afirmó.
El fotoperiodista, que cubrió en primera línea hechos que acaecieron en la Segunda República y en la Guerra Civil española, permaneció internado al final de la guerra -del 1 de marzo hasta el 13 de septiembre de 1939- en el campo de concentración de Bram, en el sur de Francia.
Para proteger a su familia, Centelles guardó en una maleta miles de negativos que albergaban documentos gráficos de esos años de conflictos políticos y la escondió en una casa en Carcasona (sur de Francia), que no recuperó hasta la muerte de Franco.
En 2009, el archivo de Centelles, compuesto por unos 12.000 negativos, generó una polémica entre el Ministerio de Cultura y la Generalitat hasta que hace seis meses finalmente ese legado llegó al Centro de la Memoria Histórica de Salamanca tras comprarlo el Gobierno por 700.000 euros.
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